domingo, 10 de julio de 2011

Enero 2008, atentado frustrado al Metro de Barcelona

Este contenido fue publicado originalmente en el blog de la Delegación de PxC de L'Hospitalet de Llobregat.

 
El Supremo rebaja la pena a los terroristas musulmanes que planearon el frustrado atentado al Metro de Barcelona y que fueron detenidos en enero de 2008 en El Raval.
Basan su argumento en que las cantidades encontradas para preparar explosivos “no eran suficientes” para provocar una gran mortandad y por tanto, “al estar en fase embrionaria”, nasti de plasti.

¿Fase embrionaria? No lo juzgó así el agente francés infiltrado en la célula terrorista cuando dió la voz de alarma al ser “voluntario” para inmolarse en la operación y ver esta inminente. Estando dentro y habiéndo sido entrenado a conciencia, se supone que sabía más que estos jueces de pandereta y chichinabo.
A dicho agente lo “quemaron” durante el juicio al hacer pública su identidad. Maravilla de justicia que tenemos, luchando incansable para la salvación de asesinos y delincuentes y eliminación de “molestias” que se lo impidan.

El agente y su familia tuvieron que cambiar de identidad y ahora viven escondidos como próscritos. Años de preparación, millones de dinero, amén de las vidas de esta familia, y todo tirado por el sumidero porque unos sujetos impresentables juegan a Perry Mason.

¿Qué extraña fascinación ejercen los musulmanes para que siempre se procure beneficiarles por parte de quienes tienen poder para ello? Inquietante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Este blog tiene instalada la moderación de comentarios.
Serán publicados en breve.

Gracias.