Empieza el cortejo nupcial

Este contenido fue publicado originalmente en el blog de la Delegación de PxC de L'Hospitalet de Llobregat.

 

Una semana después del 28-N, ya empiezan los cortejos para pillar cacho.

La presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, ha ofrecido al futuro presidente catalán, Artur Mas (CiU), el apoyo de su partido para poner en marcha “un nuevo pacto fiscal que baje los impuestos a los catalanes” y para sacar adelante unos nuevos Presupuestos para la Generalitat que generen empleo.

Hace cuatro años, Mas firmó ante notario que no pactaría con el PPC, ¿sigue vigente? A saber, porque tampoco vimos dicha acta.

Y la señora Sánchez-Camacho es así. En 1996 era directora del Ministerio de Trabajo cuando se hizo la primera legalización masiva de inmigrantes, en cambio, durante la pasada campaña se lanzó a querer echarlos a todos por copiar -a su manera, bastante ignorante-, el programa de Plataforma per Catalunya.

Por ello sigue en su línea de decir una cosa y hacer la contraria:

Sánchez-Camacho ha dicho que “con CiU corremos el peligro de un totalitarismo que acabe en la obligación de una lengua única, impuesta en todos los ámbitos”.

Estas declaraciones suyas están en el web Populares de Cataluña, con el logo del PP -ignoro si el blog es oficial- y con fecha del 13 de octubre de este año.

Resulta interesante ver como alguien que ha considerado un peligro para Cataluña a un partido antes de las elecciones, se apresura a ponerse a su disposición cuando dicho partido se ha erigido en vencedor.

Yo tengo una definición para esto, pero me la callo…